MAQUIA 2013.10 - Kame Camera

VOL. 31 Aprender

「Sin ser obligado por nadie, yendo en la dirección que me indica el corazón, estudiar es divertido.」

Foto por Kamenazhi Kazuya

Los guiones de los doramas y películas que hasta ahora me han hecho aprender muchas cosas. Como puedo aprender de los profesionales de una manera excepcional, creo que estoy un entorno realmente bendecido. No me interesan los números, pero si me llegase un papel de un matemático, supongo que estudiaría un montón (risas).

   Mi época de estudiante se me pasó volando. Después de unirme a los Johnny's en primero de secundaria, los días que podía asistir a clase comenzaron a disminuir (risas). Sinceramente, no es que odiara el estudiar en sí, es que no se me da bien aprender cosas en las que no estoy interesado. Por eso hay veces que ahora, cuando sale el tema de la época de estudiante, me siento un poco aislado. Es sólo que cuando hice el examen de admisión para el instituto, me esforcé, estudié y aprobé pero al final no llegué a graduarme. No es que me sintiese como un esclavo, ni que me arrepienta, pero se me ha quedado la sensación de que se me daba mal aprender y de que no aprendí lo suficiente. Es una pena pero yo no estoy hecho para ser obligado a aprender (risas).
   Por lo general, para vivir en esta sociedad creo que tener un certificado de graduación de una universidad de primera es algo que te causa alivio. Pero yo supe que para mi vida, la formación académica no era necesaria; aunque no fuese al colegio, no pasaría nada si aprendía lo que era más necesario para mi propia vida. Creo que no hubo ninguna duda desde que era un adolescente.
   El trabajo o los sitios de diversión, para mí se convierten en un lugar de "aprendizaje". En el dorama "Kami no Shizuku" aprendí sobre vinos y modales en la mesa. Como era el papel de un sommelier con talento natural, de repente me empezó a dar clases particulares un sommelier de primera y me llevaron a una "asociación de aprender sobre vinos" a la que es muy difícil unirse. El conocimiento que gané de los momentos duros y de mi entorno lo uso ahora en las cenas y en las citas (risas). Con los otros también; con "Sapuri" aprendía a surfear y con "1 Pound no Fukuin" aprendí a boxear. Hoy día son muy pocas las cosas que continúo haciendo, pero creo que de forma natural, ahora se han vuelto parte de mí.

Aunque por fuera sea una chica mona, si no hay "aprendizaje", no la siento.

   También son muchas las cosas que aprendí de los adultos que conocí en mi vida privada poco después del debut, cuando tenía unos 20 años. Un estilista mayor que yo, un escritor, los senpais de la agencia... Adultos que todavía hoy están en la cúspide de admiración de todo el mundo, yo pude conocerlos cuando tenía sólo 20 años. El valor estándar de "adulto" dentro de mí asciende hasta el techo. La forma de disfrutar leyendo, vestirse bien, hasta la forma de comportarse en el bar de un hotel; todo eso es porque tuve muchas oportunidades de tocar la esencia de los adultos de primera. El aprendizaje obviamente fue grande, y tengo la sensación de que de ahora en adelante también voy a poder ver las cosas que debo estudiar.
   El deseo de querer aprender algo de las personas que he conocido es fuerte. El amor es el mejor ejemplo. Los pensamientos que ha obtenido de los pasos que ha dado en su vida hasta ahora, tanto en el trabajo como en sus aficiones; quiero conocer "su mundo" y quiero ser influenciado por él. Por eso tengo una tendencia de ser atraído por las mujeres que llevan una vida estimulante. Yo soy del tipo al que no le importan lo monas que sean las apariencias de la chica, si no me atrae su mundo interior, no me atrae sexualmente. Por el contrario, aunque no sea mi tipo por sus apariencias, me siento atraído si al hablar, emerge un sentido de respeto. Me pregunto si eso es raro para un hombre. Pero es así (risas). A partir de ahí, aunque llevemos saliendo un tiempo, lo ideal es que aprendamos el uno del otro mientras seguimos manteniendo nuestros propios mundos.
   Ya como adulto, hace poco he empezado a querer aprender también el "conocimiento" común. Al igual que aprender se me daba mal cuando era un estudiante, ahora me he dado cuenta de que todavía hay un motón de cosas que no sé. A excepción de lo que he aprendido por mi propia experiencia, no sé casi nada. Probablemente tanto mi sentido común como mis conocimientos están por debajo de la media (risas). Pero creo que eso no es algo por lo que avergonzarse, sino algo que promete. Como estoy rebosante de curiosidad, de forma natural estoy lleno del "deseo de querer aprender". Ahora ya sea historia, literatura o artes marciales, investigo a fondo a lo que apunte mi antena, lo que me causa nada más que diversión. De ahora en adelante, creo que estaría bien seguir aprendiendo como si fuera un niño, de forma obediente y con entusiasmo.